3 dic 2012

Riesgos asociados a la producción del gas de esquisto


Desde hace muchos años se conoce que las rocas denominadas pizarras o esquistos bituminosos están impregnadas de petróleo y/o de gas natural, pero su explotación era de escasa rentabilidad.  
En España, después de la guerra civil, y ante las dificultades para la importación de petróleo ocasionadas por el aislamiento internacional del régimen franquista, se intentó construir una “industria del petróleo” a partir de las pizarras bituminosas existentes en la zona de Puertollano, dando origen al complejo petroquímico que todavía funciona en las inmediaciones de dicha ciudad. 
Los interesados en la arqueología industrial pueden consultar, sobre este tema, esta curiosa referencia donde se detalla la historia de la industria española de las pizarras bituminosas.

En los últimos diez años, sin embargo, se han desarrollado nuevas técnicas de 
explotación que están revolucionando el panorama energético, al conseguir extraer con gran eficiencia el gas natural ocluido en los esquistos bituminosos.
La técnica, que se denomina ‘fractura hidráulica’ o, en inglés, ‘fracking’, permite la perforación horizontal de napas de esquisto presentes en las profundidades del subsuelo y emplea la inyección de agua a gran presión, mezclada con arena y productos químicos, con el fin de fracturar la roca y extraer gas metano. 
Hoy en día la técnica proporciona el 30% del consumo de gas natural de los Estados Unidos, lo que ha hecho caer en picado los precios de ese combustible.
Sin embargo, no todo son ventajas: la técnica parece tener riesgos medioambientales importantes, tanto por el lado de la contaminación del suelo como por el efecto invernadero que pueden provocar las fugas de gas metano (mucho más potente en este aspecto que el dióxido de carbono). Al respecto, este informe de Comisiones Obreras fechado en enero de 2012 (27 páginas), tiene un considerable interés.
En algunos países europeos, como Francia y Bulgaria, la técnica está 
prohibida, un reciente informe de la respetada Royal Society británica considera que en ese país los riesgos para la salud, la seguridad y el medio ambiente pueden ser gestionados con efectividad si se utilizan las mejores prácticas disponibles y se exige su utilización mediante las normativas adecuadas. El informe (76 páginas, junio 2012).  

La OSHA norteamericana emitío una alerta sobre los riesgos de inhalación de polvo de sílice por los trabajadores que trabajan en este tipo de procesos, después de verificar que un porcentaje apreciable de las muestras tomadas mostraban concentraciones de sílice por encima de lo señalado por la legislación de ese país. El documento (7 páginas, junio 2012).  
IMAGENES de PREVENCION: Recursos on-line para prevencionistas y profesionales relacionados.
Erga-online

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu opinión es importante ...